Cuando leí el guion por primera vez, tuve una impresión diferente
Después de convertirse en la serie más vista de la historia en Netflix, ‘El juego del calamar‘ ha dicho adiós con el estreno de su tercera y última temporada. O, al menos, a la serie original, porque su último episodio ya ha dejado claro que la distopía tendrá un spin-off ambientado en Estados Unidos.
De hecho, esta revelación ha dado pie a muchas preguntas y queda por ver cómo evolucionará la historia ahora que sabemos que los juegos seguirán haciéndose a pesar de todas las personas que han muerto por el camino. Entre otras cosas, las dudas han surgido alrededor del Líder, el personaje interpretado por Lee Byung-hun, que tiene un giro importante al final de la serie de Netflix.
Por supuesto, a partir de aquí comienza el terreno de los spoilers sobre el final de ‘El juego del calamar’.
Al principio de la serie, el Líder empieza siendo un villano misterioso, pero poco a poco, el personaje evoluciona hacia alguien más ambiguo, quedando atrapado en un dilema entre el rol que ocupa dentro del sistema y una nueva versión de sí mismo, que es la que se empieza a generar por la influencia de Gi-hun.
De hecho, la figura fría y enigmática que supervisa los juegos comienza observándolo todo desde el distanciamiento, pero poco a poco, el personaje adquiere mayor protagonismo y, además, nuevas dimensiones de tristeza, cinismo e incluso un conflicto moral.
Añadiendo capas al personaje
Interpretado por Lee Byung-hun, una de las estrellas del cine coreano más célebres de los últimos veinte años, el Líder es el enigma personificado, un hombre que encierra un gran misterio y cuya única alegría aparente reside en su desconcertante devoción por el sistema que vigila. Pero llega un momento en el que los juegos se vuelven algo cada vez más personal para él.
Especialmente cuando Gi-hun (Lee Jung-jae) regresa al concurso con el objetivo de boicotearlo. Viendo el sacrificio de Gi-hun y su inquebrantable compromiso con la dignidad humana, el Líder empieza a tener un conflicto interno. Sobre él habló el propio Lee Byung-hun en una entrevista con The Hollywood Reporter, comentando la última escena de la serie, qué instrucciones recibió del creador y qué es lo que le pasa por la cabeza al personaje.
Especialmente sabiendo de qué manera le afecta que existan otros juegos en otro país, algo que se confirma por la escena final que protagoniza Cate Blanchett.
«El director y yo hablamos mucho sobre esta escena. Lo interesante es que cuando leí el guion por primera vez, tuve una impresión diferente. Pensé que el Líder ya sabía que había otros juegos, exactamente iguales, desarrollándose en otro país. Pero le pregunté por si acaso, y me dijo: ‘Por favor, interpreta la escena imaginando que no sabías que ella estaba allí’.»
El actor reconoce que esto le «confundió mucho», porque, según él, el guion daba una «impresión muy diferente».
«Lo hablamos mucho, y este es el tono que decidí adoptar en ese momento: al comienzo de la serie, al Líder casi no le quedaba esperanza en la humanidad; solo le quedaba un ápice de bondad en el subconsciente. Pero a través de su viaje con Gi-hun, pudo alimentar esa pizca de esperanza, y hacia el final, cuando su Juego llegó a su fin, trata de ver las cosas de manera diferente, pensando: ‘Tal vez Gi-hun tenía razón; tal vez todavía queda algo ahí’.»
Aunque su personaje sea una parte activa del horror de los juegos, los últimos acontecimientos de la serie plantean otro camino. Gi-hun ha dejado huella en el Líder, por pequeña que sea, y por un instante parece haber cierta posibilidad de cambio. Sin embargo, el reencuentro con otra reclutadora nos devuelve a la realidad.
«Intenta alcanzar esa sensación de cierre y la posibilidad de un nuevo comienzo, y entonces ve a otro reclutador atrayendo a nuevos jugadores. Y es ahí donde se da cuenta de que esto nunca terminará. Todo va a seguir igual. Así que esa sensación de amargura es el principal sentimiento que experimenta en ese momento. De hecho, me preguntaba si lo que intentaba comunicar llegaría a los espectadores.»
