octubre 16, 2025

Relación de la hipertrofia muscular con el modelo de progresión de la sobrecarga y las células satélite

El entrenamiento de fuerza (EF) es una intervención no farmacológica efectiva para inducir hipertrofia muscular. Para que este crecimiento muscular ocurra de forma continua, es esencial una progresión del estímulo. Tradicionalmente, esta progresión se realiza aumentando la carga dentro de una zona de repeticiones máximas (modelo LOADProg). Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que incrementar el número de repeticiones hasta el fallo con una carga fija (modelo REPSProg) también puede generar adaptaciones similares.

Aunque ambos enfoques pueden ser efectivos a nivel grupal, existe una gran variabilidad interindividual en la respuesta a distintos modelos de entrenamiento. Estudios previos han mostrado que algunas personas responden mejor a frecuencias o volúmenes de entrenamiento altos, mientras que otras obtienen mejores resultados con estímulos bajos. Esto sugiere una posible interacción específica entre el tipo de progresión y la biología individual del sujeto.

Uno de los mecanismos más estudiados que podría explicar esta variabilidad es la activación de células satélite. Estas células madre musculares contribuyen a la hipertrofia al fusionarse con las fibras musculares y donar nuevos núcleos (mionúcleos), esenciales para soportar una mayor síntesis proteica. Estudios previos han demostrado una asociación entre la expansión del pool de células satélite y mayores aumentos de masa muscular.

Además de las células satélite, otros procesos como la proteólisis (degradación de proteínas) y la remodelación de la matriz extracelular (ECM) también se han vinculado a la regeneración y crecimiento muscular. Sin embargo, su papel en la variabilidad interindividual aún no está bien establecido.

El presente estudio se propuso investigar si distintos modelos de progresión del EF (LOADProg vs. REPSProg) generan respuestas hipertróficas individuales diferentes, y si estas diferencias están asociadas a cambios crónicos en células satélite, mionúcleos, proteólisis y remodelación de la ECM.

Este estudio fue el primero en analizar respuestas hipertróficas individuales a modelos de progresión de carga distintos utilizando un diseño intra-sujeto. Sorprendentemente, se observó que aproximadamente un tercio de los participantes mostró mayor crecimiento muscular con REPSProg (aumento de repeticiones) en comparación con LOADProg (aumento de carga). Esta mayor hipertrofia estuvo asociada a un incremento más pronunciado en el número de células satélite, lo que respalda la hipótesis de que estas células desempeñan un papel relevante en la adaptación individual.

La mayoría de los participantes (60%) respondieron positivamente a ambos modelos, demostrando que tanto REPSProg como LOADProg son estrategias válidas para promover hipertrofia en personas no entrenadas. Sin embargo, un pequeño grupo (13.5%) no respondió significativamente a ninguno de los protocolos, lo que refleja la existencia de “no respondedores”, un fenómeno también reportado en estudios previos. En estos casos, factores como la genética, el estado nutricional o una carga insuficiente podrían explicar la falta de adaptación.

Lo más destacable es que un 51.3% de los sujetos presentó una diferencia significativa (>5.7%) en la respuesta hipertrófica entre protocolos. Dentro de este grupo, el protocolo REPSProg benefició al doble de participantes en comparación con LOADProg (12 vs. 7), lo cual sugiere que para muchas personas, progresar en repeticiones puede ser más efectivo que aumentar carga. Además, algunos de los “REPERS” (respondedores a REPSProg) no mostraron ninguna mejora con LOADProg, lo que refuerza la idea de que la progresión elegida puede ser decisiva para desencadenar la adaptación.

Cabe destacar que el volumen total de entrenamiento fue similar entre protocolos, aunque la estructura fue distinta: REPSProg acumuló más repeticiones y menos carga, mientras que LOADProg se centró en pesos más elevados con menos repeticiones. Esto sugiere que, a pesar de igualar el volumen, la forma en que se distribuye puede influir significativamente en la adaptación.

En cuanto a los mecanismos moleculares, la principal diferencia encontrada fue el aumento más pronunciado en el número de células satélite en respuesta a REPSProg. Además, se observó una correlación positiva significativa entre el incremento en área muscular y el contenido de células satélite en este grupo. En contraste, no se encontraron diferencias en el número de mionúcleos, lo cual podría explicarse por la duración limitada del estudio (10 semanas). Estudios previos que sí observaron aumentos significativos en mionúcleos suelen utilizar intervenciones más largas (≥16 semanas). Es posible que, a mayor duración, se manifestaran diferencias también en este parámetro.

Respecto a los marcadores de proteólisis y remodelación de la ECM, no se observaron diferencias significativas entre los protocolos. Esto sugiere que estos mecanismos no están directamente asociados a la variabilidad individual de respuesta en el contexto de los modelos de progresión evaluados. Aunque se encontraron pequeñas diferencias en la proteína TIMP-1 (inhibidor de MMPs), su implicación funcional no es clara y se necesitan más estudios para determinar el rol de la ECM en la hipertrofia diferencial.

La ausencia de cambios significativos en marcadores de proteólisis (como calpaínas, proteasoma y proteínas poliubiquitinadas) sugiere que estos procesos no se regulan de forma diferencial entre protocolos de progresión en sujetos sanos no entrenados. A pesar de que se ha teorizado que una proteólisis elevada podría inhibir el crecimiento muscular, los datos actuales no respaldan esta hipótesis en este contexto.

Conclusiones

  • El modelo de progresión del entrenamiento de fuerza puede influir significativamente en la respuesta hipertrófica individual.
  • Un número considerable de participantes obtuvo mayores beneficios con un protocolo basado en el aumento de repeticiones (REPSProg).
  • El incremento en células satélite fue el principal mecanismo asociado a una mayor hipertrofia, especialmente con REPSProg.
  • No se observaron diferencias en los cambios de mionúcleos, proteólisis ni remodelación de la matriz extracelular entre protocolos.
  • Ambos modelos (LOADProg y REPSProg) son válidos y efectivos, pero su impacto puede depender del perfil individual del sujeto.
  • Es necesario continuar investigando otros mecanismos moleculares y ampliar la duración del entrenamiento para entender completamente la variabilidad en la respuesta al entrenamiento de fuerza.

Acceso libre al artículo original en: https://www.fisiologiadelejercicio.com/wp-content/uploads/2025/06/Individual-muscle-hypertrophy-response-is-affected.pdf

Referencia completa:

Scarpelli MC, Bergamasco JGA, Godwin JS, Mesquita PHC, Chaves TS, Silva DG, Bittencourt D, Dias NF, Junior RAM, Filho PCC, Angleri V, Costa LAR, Kavazis AN, Ugrinowitsch C, Roberts MD, Libardi CA. Individual muscle hypertrophy response is affected by the overload progression model and is associated with changes in satellite cell content. Eur J Appl Physiol. 2025 Jun 11. doi: 10.1007/s00421-025-05817-y.

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