Me sentí traicionado y encima fue un tremendo fracaso

Marlon Brando es una de las grandes leyendas de Hollywood. Tardó muy poco en convertirse en uno de los actores más solicitados de Estados Unidos, algo que él mismo aprovechó para pedir sueldos millonarios. Sin embargo, hay una película que le motivó tanto que aceptó hacerla gratis, solamente para llevarse después una tremenda decepción con ella.
Lo cierto es que Brando había decidido retirarse del cine tras el fracaso de ‘La fórmula’ en 1980, pero casi una década después le llegó la posibilidad de participar en ‘Una árida estación blanca’. Su primera respuesta fue exigir un sueldo de 3,3 millones de dólares y un 11,3% de las ganancias de la película en taquilla. Sin embargo, el actor cambió de idea cuando descubrió más detalles sobre qué historia iba a contar.
El desencanto de Brando


‘Una árida estación blanca’ es un drama sobre el apartheid que el propio Brando comentó que «daba al público blanco la oportunidad de experimentar a través de los ojos de un sudafricano blanco lo inhumana que era la política» en su libro de memorias ‘Songs My Mother Taught Me’. Por ello, Brando aceptó hacerla sin cobrar, algo de lo que no tardaría en arrepentirse.
Él mismo definió después la película como «el trabajo de un amateur intentando jugar duro» y no dudó en dar sugerencias propias para así poder «mejorar la película sin tener que volver a rodarla«, pero no le hicieron ni caso, incluso cuando se ofreció a pagar de su bolsillo los gastos de postproducción necesarios para hacer esos cambios:
Me sentí resentido por haberme excedido en nombre de la película y una buena causa, trabajando duro sin cobrar, y sin que me permitieran reeditar al menos una parte de mi película como debía.
Un movimiento totalmente inesperado por parte de un actor más conocido por su apatía a la hora de encarar los papeles que interpretaba. Quizá por ello quedó tan desencantado con el resultado final de esta película dirigida por Euzhan Palcy: «Me sentí engañado y encima la película fue un tremendo fracaso«.
El batacazo de ‘Una árida estación blanca’ fue tal que apenas recaudó 3,7 millones de dólares en Estados Unidos cuando había costado 9 millones. Eso sí, Brando consiguió por ella la última nominación al Óscar de su carrera, en esta ocasión en la categoría de mejor actor secundario. El premio fue finalmente para Denzel Washington por su trabajo en ‘Tiempos de gloria’.